Ya sea acompañado de alimentos o disfrutado solo, una copa fresca de vino blanco siempre es una buena elección. Sin embargo, no todos los vinos blancos son iguales. Conocer las diferencias entre las principales variedades de uva y estilos de vinificación es clave para encontrar la copa perfecta para cada ocasión.
Cómo se Hace el Vino Blanco
El vino blanco se produce en todo el mundo a partir de diversas variedades de uvas y regiones. La mayoría de los vinos blancos se obtienen del jugo directamente prensado de uvas blancas, es decir, las uvas se cosechan y se llevan a la bodega, y su jugo se prensa de inmediato (con poco o ningún "contacto con la piel"). Las técnicas de vinificación posteriores al prensado varían según el enólogo, lo que hace que el mundo del vino blanco sea tan emocionante.
Después del prensado, el jugo se fermenta con levaduras naturales (espontáneas/nativas) o cultivadas en una variedad de recipientes. El acero, el roble y el cemento son los recipientes más comunes para la vinificación y el envejecimiento.
Los Efectos del Acero, el Roble y el Cemento
Muchos vinos blancos se vinifican completamente en acero, ya que este material mantiene el oxígeno fuera del recipiente y preserva la acidez natural del jugo, una característica deseable en el vino. Por otro lado, la vinificación y el envejecimiento en barrica de roble permiten que una pequeña cantidad de oxígeno entre en contacto con el jugo, añadiendo texturas y sabores complejos al vino. El envejecimiento en cemento es una combinación de ambos, proporcionando un entorno oxidativo sin impartir sabores de roble al vino.
Los Sabores a Madera
Cuando los vinos blancos se fermentan y/o envejecen en roble, adquieren notas de vainilla, especias, canela, clavo, coco y otros sabores. Aunque estos sabores pueden dar una sensación cálida y suave en el paladar, no son técnicamente "dulces", ya que la vinificación en roble no añade azúcar residual. (Olvida las cosas negativas que has oído sobre los vinos "amaderados"; aunque el exceso de roble puede ser desagradable, los vinos blancos con roble bien integrado pueden ofrecer algunas de las experiencias de bebida más deliciosas).
Cómo Acompañar el Vino Blanco
Las combinaciones de alimentos dependen de la acidez y la estructura del vino. Para vinos ligeros, crujientes y refrescantes con alta acidez, recomendamos ensaladas frescas o aperitivos salados. Los vinos blancos con más cuerpo y estructura pueden acompañar platos más pesados como aves asadas, pescado a la parrilla y quesos fuertes. Los vinos blancos con un poco de azúcar residual son perfectos para platos picantes, como la comida india o tailandesa.
Las Variedades de Uva Blanca Más Comunes
Chardonnay
El Chardonnay es la uva versátil por excelencia. Se cultiva en casi todas las regiones vitivinícolas del mundo, gracias a su capacidad para prosperar en diversos climas y tipos de suelo. Debido a su naturaleza adaptable, el chardonnay se vinifica en una variedad de estilos (generalmente de cuerpo medio a completo) y en diferentes recipientes. Para una expresión equilibrada y directa, prueba Sandhi, producido en Santa Bárbara, que combina maravillosamente una mentalidad del Viejo Mundo con frutas del Nuevo Mundo. La cosecha temprana y la meticulosa integración del roble ofrecen lo mejor de ambos mundos.
Sauvignon blanc
Al igual que el chardonnay, el sauvignon blanc se cultiva en diversos suelos y regiones del mundo. En regiones cálidas y soleadas del Nuevo Mundo (como Marlborough, Nueva Zelanda, y el Valle de Napa en California), los vinos de sauvignon blanc tienden a mostrar sabores de frutas tropicales, cítricos y hierba. En regiones del Viejo Mundo como Sancerre y Pouilly-Fumé, estos vinos tienden a mostrar sabores más terrosos y una acidez cítrica.
Pinot grigio
El pinot grigio (llamado pinot gris en regiones de habla francesa) ha estado asociado durante mucho tiempo con vinos blancos baratos y producidos en masa de Italia. Aunque estos vinos todavía existen, el pinot grigio de alta calidad de un productor de renombre puede ser una experiencia reveladora. Cuando se produce adecuadamente, el pinot grigio suele tener un tono cobrizo, con un perfil floral y es muy fácil de beber. Prueba esta botella de Alto Adige para un ejemplo delicioso.
Riesling
Si hay algo que aprender de esta introducción al vino blanco, que sea esto: no todos los riesling son dulces. Cuando se vinifica seco, el riesling produce algunos de los vinos blancos más ácidos y refrescantes del mercado. Para una expresión seca y deliciosa, prueba Empire Estate. Para un vino semi-seco perfecto para acompañar comida picante, Peter Lauer’s Barrel X es la opción.
Chenin blanc
¿Nunca has oído hablar del chenin blanc? No hay mejor momento que el presente. Esta uva de alta acidez es mejor conocida por sus expresiones francesas (Valle del Loira) y sudafricanas, aunque también se cultiva en Estados Unidos, Australia y más allá. Estos vinos son apreciados por sus perfiles de sabor maduros y de cuerpo medio a completo, aunque en expresiones bien hechas, la alta acidez natural de la uva los mantiene equilibrados. Piensa en ellos como jugo de manzana para adultos, solo que mejor.
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